
Historia de las Ideas Políticas
El derecho contemporáneo es comúnmente asumido en una dimensión dual, según la cual es: de un lado, un entramado normativo, y de otro lado, un conjunto de prácticas sociales. Dicho de forma sencilla, el derecho es entendido como el conjunto de normas promulgadas por autoridades estatales, por lo que, en consecuencia, la ciencia del derecho pretende ser la descripción objetiva y sistemática de ese lenguaje (es decir, el estudio dogmático del derecho). No obstante, el derecho también es apreciado como una práctica social compleja, en la que concurren diversas acciones personales, colectivas, e institucionales que se constituyen en hechos sociales apreciables como fenómenos empíricos.
Al no ser una realidad aislada, estos hechos manifiestan especial importancia en otras dimensiones de la vida social, tales como: la económica, la política, la cultural, entre otras; en las que el derecho está presente como elemento transversal. Es por ello que, disciplinas como la sociología, la economía y la ciencia política, suministran un conjunto de insumos y herramientas teórico-conceptuales bastante pertinentes para hacer una lectura de mayor rendimiento al Derecho. De esta forma, se torna necesario que un profesional del Derecho cuente con este tipo de elementos que le permitan una comprensión más sistemática y ordenada de los fenómenos sociales ante los que se posiciona como profesional, bien sea como: abogado litigante, como servidor público, como abogado asesor o como docente e investigador.

Filosofía del Derecho
La filosofía del derecho se ha ocupado tradicionalmente de los problemas más generales del derecho y del conocimiento jurídico. Su función ha sido esencialmente teórica, contribuyendo al esclarecimiento de los esquemas conceptuales que subyacen a nuestra comprensión del derecho, y proporcionando instrumentos conceptuales que permiten comprender y solucionar problemas prácticos. Su papel central en las discusiones acerca de la naturaleza de los sistemas jurídicos, la autoridad del derecho, el razonamiento judicial, la estructura de las normas, la responsabilidad y la ciencia jurídica, difícilmente puede negarse. En ese sentido, la filosofía del derecho es un complemento indispensable para los estudios de dogmática y sociología jurídica.
El curso de Filosofía del Derecho se concibe como un espacio pedagógico para el estudio de problemas relacionados con el análisis de los discursos jurídicos, tales como la ontología, la epistemología y las relaciones de estos dos discursos con la razón práctica contemporánea y sus principales desafíos. En consecuencia, en el curso de filosofía del derecho, se espera mostrar al estudiante una particular manera de entender el ejercicio filosófico aplicado al derecho y, por tanto, los rendimientos que pueden obtenerse a partir de dicha actividad para su rol como profesional del derecho.

Interpretación y Argumentación Jurídica
La interpretación y la argumentación desempeñan un papel esencial en el derecho como práctica social normativa. A las operaciones jurídicas más elementales precede casi siempre un proceso cognoscitivo y creativo en el que los participantes asignan significado a los textos jurídicos y razonan acerca de las soluciones que el derecho prevé para casos de interés general o circunstancial. Labores tan cotidianas como la definición del contenido del derecho y la identificación y acatamiento de disposiciones jurídicas presuponen, de forma más o menos acentuada, ese proceso en el que se asigna sentido, alcance y justificación a las normas jurídicas. Es por eso que cobra relevancia especial la existencia de un curso en el que se estudien, con instrumentos teóricos y vocación práctica, los aspectos lingüísticos y normativos que gobiernan tanto la formulación de enunciados interpretativos como la construcción de argumentos jurídicos. De esa manera los estudiantes adquieren las competencias necesarias para estudiar con claridad y perspectiva crítica el contenido de las áreas dogmáticas del derecho, desarrollando de paso una de las habilidades fundamentales de la profesión: fijar el significado de las disposiciones normativas y argumentar jurídicamente.

Consultorio Jurídico Virtual
El Consultorio Jurídico y su Centro de Conciliación, es el Centro de Prácticas de la Facultad de Derecho.
El día 27 de marzo del año 2001 y mediante Resolución N. 031 del Tribunal Superior de Medellín – Sala de Gobierno y luego del cumplimiento de los requisitos legales exigidos, esta dependencia en desarrollo de las facultades especiales conferidas por el Decreto 765 de 1977 Aprueba el Consultorio Jurídico de la Universidad de San Buenaventura de Medellín, adscrito a la Facultad de Derecho con sede en Bello. El nombre lo adquiere de San Juan de Capistrano, fraile franciscano y jurisconsulto, nacido en Italia en el Siglo XIV.
Posteriormente y como dependencia integrada al Consultorio Jurídico, fue creado el Centro de Conciliación, cuyo funcionamiento fue autorizado por medio de la Resolución N. 0152 del 20 de febrero del 2003 del Ministerio del Interior y de Justicia.
